Decoración con alfombras

Si quieres decorar la estancia por muy poco nada como las alfombras para lograrlo. Y es que decorar es mucho más que amueblar pero no por ello tendréis que gastar más de la cuenta. Bastará con hacer un presupuesto e ir mirando las opciones que tenéis a vuestro alcance como puede ser una alfombra.

Elige el tamaño de alfombra correcto

Por lo que respecta a su tamaño decir que en el caso de las estancias pequeñas será mejor que la alfombra tenga un tamaño proporcionado, mientras que si la estancia es más grande todo dependerá del grado de protagonismo que queráis otorgar a la alfombra. Si buscáis decorar a través de ella, mejor que también sea grande y vistosa.

Una alfombra para cada estilo

Pues bien, como ocurre con el resto de elementos de la estancia, cada diseño se corresponderá con un tipo de decoración. En este sentido, en las decoraciones clásicas las alfombras también han de serlo. Estampaciones como las de flores y la armonía de colores son las claves para escoger una alfombra de estas características. Hay modelos realizados en tejidos con calidad aceptable a un precio realmente asequible, por lo que no supondrá ningún esfuerzo económico adquirir un modelo de este tipo.

En el caso de las decoraciones tipo nórdica, decir que se puede dar el toque de color tan sugerente que tienen a través de la alfombra. Para este tipo de espacios nada como optar por un modelo realizado en clave monocromática en el que los colores flúor o chillones sean los protagonistas. De este modo, aportaréis el tan esperado toque de luz y color a la estancia y será el centro de todas las miradas la pieza.

Las estancias minimalistas podrán poner una alfombra discreta. Para ello, bastará con escoger un modelo en clave también monocromática y preferentemente en tonos suaves aunque este último punto es más flexible. Por ello, podréis colocar desde alfombras en color crema, pasando por otras opciones en las que el rojo, el azul Klein o incluso el negro puedan aportar un toque diferente a la estancia.

Calidez en el hogar

En el caso de las estancias de tipo étnico nada como las piezas de colores vivos y entremezclados. Y es que el punto de color debe venir, sobre todo, de los textiles y, en su defecto, también de elementos como las alfombras.

En cuanto a las estancias con decoración estilo shabby chic, ya sabéis que nada como una alfombra en tonos claros. Los tonos pastel y el blanco roto así como el blanco inmaculado, son los más empleados en este tipo de decoración sumamente elegante que evoca a las estancias de corte clásico. Si os queréis decantar por algún tipo de estampación dentro de este estilo ya sabéis que la floral será la elección más adecuada en vuestro caso. No perdáis la opción de introducir en vuestra estancia un elemento como es la alfombra de estas características porque os encantará.

En las decoraciones rústicas las alfombras que emulan las pieles de animales son una de las opciones a tener muy presentes. Se ha de optar en todo momento por piezas que jueguen por estos efectos y que hagan de los tonos naturales, en la gama de los marrones, el color escogido. Será un acierto que guardará la perfecta armonía si se compara con el resto de elementos de la estancia.

Las estancias eclécticas o más modernas podrán optar por alfombras de estampados geométricos, colores vivos o materiales más atípicos. La clave está en que el conjunto sea armónico y el resultado espectacular, algo para lo que sólo hace falta perder el miedo a realizar mezclas, aparentemente, imposibles. Probad, os sorprenderá el resultado.